Viernes Santo
Queridos Amigos, hoy, día en que recordamos la pasión del Señor, les regalo este soneto que compuse hace muchos años.
¡Qué pena, Jesús, verte tan dolido!
¡Qué pena no poder haberte amado
Soneto a Jesús Crucificado
¡Qué pena, Señor, verte maltratado!
mucho antes de haberte conocido!
Te muestras a nosotros tan herido,
para enseñarnos que cuando se ha amado
siempre vale la pena lo sufrido.
Quisiste terminar incomprendido
padeciendo el dolor que has padecido
dejándote morir crucificado.
Como signo del hombre rescatado
quedó tu eterno amor en cruz tallado
y el pecado del mundo allí vencido.
Comentarios
Publicar un comentario